Hay una amplia gama de terapias para los trastornos del espectro autista (TEA), pero la eficacia de cada uno varía considerablemente de un niño a otro. Los avances en medicina y en las terapias de modificación conductual se han visto obstaculizada de manera significativa por los desacuerdos sobre la naturaleza y las causas de trastornos del espectro autista, y por una relativa falta de terapias eficaces hasta la fecha reconocida por las autoridades médicas. La situación se complica aún más por los padres que han encontrado un tratamiento particular eficaz.
Aunque no hay una cura para los Trastornos del Espectro Autista, la investigación indica que las intervenciones educativas y la modificación conductual tienen un efecto importante cuando se inicia lo más pronto como sea posible (es decir, a los dos años de edad en adelante).
La intervención temprana es crucial en los Trastornos del Espectro Autista (TEA).
Cuando un niño presenta un retraso en el desarrollo, si no es tratado adecuadamente y la intervención se realiza lo más pronto posible, el problema se agrava con el tiempo. El principio de la intervención temprana es proporcionar terapias apropiadas para reducir al mínimo los retrasos y maximizar las posibilidades para alcanzar los hitos normales en el desarrollo.
Los objetivos de la atención temprana están enfocados para que un niño con TEA pueda:
- Establecer una mejor comunicación y desarrollar habilidades sociales.
- Eliminar las conductas obsesivas, repetitivas y los comportamientos desafiantes.
- Desarrollar las habilidades que le permitan realizar las actividades de la vida diaria (higiene, vestirse, comer, ir al baño , etc)
- Mejorar la coordinación física.
- Desarrollar las habilidades de atención conjunta, imitación y el juego.
- Disminuir los problemas sensoriales.
El tratamiento basado en la evidencia es importante.
Hay muchos tipos de intervenciones posibles para Trastornos del Espectro Autista, que van desde los que tienen una sólida investigación acerca de su eficacia, hasta los que se apoyan en pruebas anecdóticas, y otros que deliberadamente se aprovechan de la vulnerabilidad de los padres.
Actualmente, los tratamientos basados en la evidencia son los que intervienen el comportamiento, como el análisis aplicado conductual y el programa Lovaas. Es importante señalar que estas intervenciones todavía no pueden satisfacer a todas las familias debido al costo, la intensidad y la experiencia necesaria.
Cabe señalar que la falta de investigaciones rigurosas no significa que una intervención no sea ineficaz. Por ejemplo, estudios pequeños han demostrado que las intervenciones tales como el Floortime y el modelo de desarrollo pragmático benefician el desarrollo de los niños con TEA.
Entre las terapias de intervención temprana de los Trastornos del Espectro Autista encontramos:
Centrados en la conducta:
- Analisis conductual aplicado (ABA).
- El programa Lovaas.
- Apoyo conductual positivo
Centrados en el desarrollo:
- Floortime.
- Modelo de desarrollo social pragmático.
Intervenciones combinadas
- Programa TEACCH
- Modelo SCERTS
- LEAP
- Programa Hanen
- Programa Son-Rise
Intervenciones de integración sensorial:
- Terapia de Integración Sensorial
- Entrenamiento de Integración Auditiva y Musicoterapia
- Snoezelen
- Terapia Ocupacional auditiva y visual
- Neurofeedback
Intervenciones biomédicas
- Medicamentos
- Dieta libre de gluten y caseína.
- Secretina y enzimas digestivas
Las terapias para tratar los trastornos del espectro autista están continuamente en desarrollo, y pueden presentar una variedad de enfoques. Lo importante es intervenir lo más tempranamente posible para minimizar los retrasos y desviaciones del desarrollo y evaluar la eficacia y aceptación de la terapia en un niño con autismo.
Posts relacionados: Terapia ABA para niños autistas | Sistema de comunicación con intercambio de imágenes (PECS)
No hay comentarios:
Publicar un comentario